El Ministerio ruso ratificó que su posición es atacar el régimen nazista ucraniano y no a su población.
El Ministerio de Defensa de Rusia comunicó este sábado que seis lanchas de la Armada ucraniana (camufladas como civiles) realizaron un ataque contra buques de la Flota del Mar Negro rusa, las cuales transportaban 82 efectivos ucranianos que depusieron las armas en la Isla de las Serpientes.
De acuerdo al reporte del Ministerio ruso, el objetivo de ese ataque era la venganza contra los efectivos ucranianos rendidos y poder acusar al Ejército ruso de la masacre de los prisioneros.
El enfrentamiento dejó como resultados seis lanchas destruidas, por el momento, no se reportan fallecidos ni heridos.
Debido a que fueron detectados drones estratégicos estadounidenses RQ-4 Global Hawk y MQ-9A Reaper «sobre el área del montaje», el ministerio ruso indica la posibilidad de que estos “dirigieran los buques ucranianos contra los barcos de la Flota rusa del Mar Negro».
Por su parte, el presidente ucraniano informó el pasado jueves que todos los efectivos de su país que defendían la Isla de las Serpientes murieron a manos de las tropas rusas, aunque a la fecha no ha dado detalles ni cifras sobre la denuncia.
El Ministerio de Defensa ruso desmintió las acusaciones de Kiev publicando un video que ilustra el desembarco de los prisioneros ucranianos en el puerto de Sevastópol, al mismo tiempo, repudió la acción del Gobierno ucraniano que entregó armas a los civiles, aludiendo que ésto podría ocasionar lamentables pérdidas humanas.
«El régimen nacionalista en Kiev reparte en masa y sin control a habitantes de las localidades ucranianas armas automáticas, lanzagranadas y municiones. Involucrar a la población civil en actividades militares inevitablemente llevará a accidentes y víctimas», puntualizó el portavoz del ministerio de Defensa ruso, Ígor Konashénkov.
Las provocaciones a las fuerzas rusas, lejos de distender la compleja situación de la península ucraniana, buscan incentivar aun más el conflicto.
Cabe destacar que Moscú retomó este sábado sus operaciones militares en Ucrania, tras una pausa de varias horas, luego que las máximas autoridades de Kiev se negaran a entrar en un proceso de negociación con Rusia.
«Debido a que Ucrania, básicamente, se negó a negociar, esta tarde se reanudó el avance de las principales fuerzas rusas de acuerdo con el plan de la operación», dijo el vocero del Kremlin Dmitri Peskov ante la prensa.
Al cumplirse el tercer día de operaciones bélicas en Ucrania, Rusia lamentó la posición del Gobierno de Kiev, mientras el presidente ucraniano Volodímir Zelenski aseguró este sábado que sus tropas han repelido con éxito el ataque a la capital.
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